En medio de controversias por mensajes antisemitas y elogios a Hitler, Grok, la inteligencia artificial de Elon Musk, ha conseguido un contrato de 200 millones de dólares con el Departamento de Defensa estadounidense.
La firma xAI podrá ofrecer sus servicios de inteligencia artificial a cualquier agencia federal gracias a este acuerdo, colocando a Musk junto a gigantes como OpenAI y Google en el apoyo gubernamental de defensa.
La polémica surgió días después de una actualización importante del chatbot en julio, tras lo cual xAI pidió disculpas y modificó sus algoritmos para evitar respuestas extremistas. No obstante, inquieta que la versión Grok 4 refleje posiciones conocidas de Musk.
La relación de Musk con autoridades estadounidenses ha sido compleja y las dudas sobre la seguridad de usar IA con antecedentes polémicos en el gobierno siguen creciendo. Congresistas, sobre todo demócratas, han iniciado investigaciones para revisar la gestión y confiabilidad de Grok en entornos públicos.
El contrato evidencia el dilema entre innovación en defensa y los riesgos éticos de la IA.